Los consumidores “exigen, cada vez más, productos certificados”
Control Union está presente en 70 países, entre ellos Uruguay, donde brinda servicios a todos los eslabones de la cadena. Entre sus unidades de negocios se destaca Collateral, un warrant financiero que opera básicamente con granos y ganado. Además, de la certificación de los procesos productivos y el control de calidad y cantidad de varios productos.
“Básicamente nos dedicamos a tres servicios específicos, uno es la inspección de mercaderías, otro que es la certificación de mercaderías y procesos productivos, y el tercero es de garantía, de custodia de mercadería, para lograr el otorgamiento de crédito para las inversiones”, dijo a VERDE el Ingeniero Guillermo Ball, integrante del directorio de Control Union..
La valorización de las certificaciones por parte de los consumidores crece “a una velocidad increíble”, reconoció Ball. Afirmó que quien vende azúcar, por ejemplo, no podrá venderla en los próximos años si el producto no tiene esas certificaciones. Lo mismo ocurrirá con cualquier otro producto. “Hoy vemos que eso sucede también con productos que demandan las principales marcas de ropa a nivel global”, sostuvo.
Si bien reconoció que en Asia este tipo de exigencias demorarán un poco más en plantearse, opinó que es una tendencia que se generalizará. “Es algo que vino para quedarse. Las nuevas generaciones de chinos de las grandes ciudades no tienen nada diferente a la gente de las grandes ciudades europeas, así que es una cuestión de tiempo”, dijo.
Consideró que los gobiernos de los países de Sudamérica están tomando conciencia sobre este nuevo perfil de los consumidores, y que el país de la región que más está trabajando en ese sentido es Chile.
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