Preocupación por injerencia política sin respaldo científico en agricultura
Esa fue una de las conclusiones de Global Farmer Network, red mundial de agricultores que se reunió en junio en Alemania, con la participación de dos empresarios uruguayos.
Producción: Ruben Silvera
Redacción: Mauro Florentín
Uruguay ganó un mayor posicionamiento en el mundo agrícola, no solamente por la evolución del área y del volumen de granos producidos en los últimos 20 años, sino también por la gestión de algunos productores uruguayos en su manera de desempeñarse en esa actividad.
Es el caso de Gabriel Carballal, productor del departamento de Soriano, que desarrolla un rol destacado en una red de agricultores mundiales, que se originó en Estados Unidos (EEUU), pero que trascendió fronteras internacionales.
Entre el 12 y el 18 de junio de este año en la ciudad de Frankfurt, Alemania, se realizó el encuentro anual de Global Farmer Network, en la que hubo participación uruguaya.
En entrevista con VERDE, Carballal –que fue el primer productor uruguayo en integrar ese grupo– se refirió a la visión planteada en ese ámbito respecto a que “la política se está metiendo activamente en la producción agropecuaria, muchas veces basados en lo que la comunidad quiere y no en la ciencia”. Eso resulta “peligroso”, sostuvo en alusión al riesgo de descartar los argumentos científicos.
La red fue creada en 2006, en Iowa, por un puñado de agricultores de ese lugar de Estados Unidos y, posteriormente, se amplió y nuclea a productores de diferentes regiones productivas de 62 países del mundo. Actualmente, esa organización cuenta con 260 productores, principalmente de Norteamérica, Europa, Brasil, entre otros países y continentes.
En 2011 Carballal fue nominado para participar de esa red, por sugerencia del productor argentino Roberto Peiretti.
El empresario uruguayo contó que en Iowa las autoridades entregan un premio anual denominado World Food Price, que es “una especie de premio Nobel a la agricultura”.
Grupos y comunicación
Una de las novedades planteadas en el encuentro de este año fueron las reuniones regionales, debido a que hasta el momento solamente se habla inglés y eso limita la participación de más agricultores. La propuesta es hacer “grupos regionales”, de habla hispana, alemana, entre otros idiomas, comentó.
El financiamiento de esa red mundial de productores se basa en aportes de instituciones de perfil variado, como grandes empresas del sector agrícola, de la tecnología, los servicios, el comercio, entre otros rubros. Incluso, también participa en la financiación alguna entidad de perfil filantrópico, como la fundación Bill y Melinda Gates, del reconocido empresario informático creador de Microsoft y su exesposa, según mencionó Carballal a modo de ejemplo.
El foco principal de la reunión de 2022 estuvo en la “integración de productores de distintas zonas y de lugares contrastantes”, para que puedan “conocer los desafíos, las oportunidades, las formas de trabajar, de qué herramientas disponen, los problemas de infraestructura y logística, las dificultades de los mercados”, entre otros asuntos que afectan a la producción agrícola, repasó.
Acotó que otro objetivo es “brindarle herramientas” a los productores integrantes de la red, para que puedan manejarse en la comunicación, específicamente al otorgar una entrevista o difundir alguna información en los medios de prensa.
“Que sea el productor el que cuente la historia, lo que hacemos, por qué estamos orgullosos de nuestra actividad, saber cómo enfrentarnos en las redes sociales”, señaló.
Dijo que eso es una “especie de cursillo” vinculado al manejo de los diferentes medios informáticos y tecnológicos en el área de las comunicaciones.
“Cómo hacer para contar una historia, de manera resumida, en 5 minutos, y además cómo relatar una mini historia en 1 minuto”, agregó.
A propósito, se refirió al concepto de elevator pitch (presentación de ascensor, en inglés), que comprende hacer en 30 segundos una explicación básica sobre un tema puntual, como si fuera el tiempo que demora en subir o bajar en un ascensor.
Realidades contrastantes
Al continuar con sus comentarios sobre la agenda abordada en la reunión realizada en Alemania, Carballal remarcó los “principales desafíos que tienen los productores agrícolas de diferentes regiones”, que “son distintos” para un agricultor uruguayo que para otros, como del estado brasileño de Mato Grosso, del país asiático Nepal o de alguna zona productiva alemana.
Planteó que “las oportunidades y la situación de la infraestructura también es diferente, y todo es muy contrastante”, lo que representa una “riqueza” en cuanto al conocimiento de “otras realidades”.
Y valoró que eso hace que “a uno le cambie la perspectiva”, respecto a cómo uno mismo mira a su propio país y cómo lo hacen otros.
En este encuentro anual, la agricultora de Nigeria Patience Koku, se refirió a que la mayor parte de esa actividad productiva en ese país está a cargo de las mujeres, según relató Carballal. En el evento se argumentó que las mujeres “son más prolijas”, tienen “más capacidad de hacer labores manuales” y hacerlas de manera “más eficiente”.
Koku no tiene tierra propia. “Los agricultores nigerianos arriendan campos de 1 o 2 hectáreas”, y “su mayor preocupación es la seguridad”, porque “ella no iba a su chacra por temor a que la mataran”, advirtió.
Carballal rescató esa experiencia para saber valorar que la situación de los productores uruguayos es “menos mala” o es “un paraíso”, si se compara con la que enfrentan otros agricultores del mundo.
Al productor africano ni se le pasa por la cabeza el problema del incremento de precios de los insumos, porque ni siquiera tienen acceso a esos productos requeridos para sus plantaciones, señaló.
Preocupación europea
Otros temas de relevancia abordados por los integrantes de la organización es “el medio ambiente”, con “los productores encargados del cuidado” del mismo en los predios que explotan, y “los políticos convencidos de que lo estamos haciendo pelota”, graficó el agricultor uruguayo.
Dijo que “la opinión pública está muy manipulada” y “asusta un poco esa situación a los productores agropecuarios de Europa”, como lo mencionaron los representantes de esa zona en el encuentro de la Global Farmer Network, realizado en Frankfurt.
Uno de los puntos en los que hicieron hincapié se vinculó al denominado Pacto Verde Europeo (Green Deal), que estableció la Unión Europea, con una serie de objetivos hacia 2050, como cambios en los sistemas de producción de alimentos, tendientes a reducir el impacto en el medio ambiente.
Eso pretende, entre otras cosas, que el 20% de la producción agrícola sea de manera orgánica, lo que “seguramente hará disminuir” el volumen de granos de Europa para ese año, consideró Carballal.
Otra meta es la reducción del uso de fertilizantes nitrogenados a casi el 50% respecto a lo que están usando hoy los agricultores europeos.
Ese productor uruguayo recordó que en algunos países donde se pretendió hacer algo similar terminó en una catástrofe, como sucedió en Sri Lanka, que es una isla ubicada al sur de la India, generando hambruna en sus poblaciones.
En la reunión celebrada este año también participó el ingeniero Mathías Nario, de la empresa Medio Agua, quien resaltó la importancia de la organización de Global Farmer Network y la presencia de agricultores interesados, con perfiles variados.
“Había un productor de Polonia que tenía 17 hectáreas, un productor familiar que tenía ganado, cabras y gallinas”, y “en contraste, había un productor de Mato Grosso, con 30.000 hectáreas de soja”, contó.
Destacó con eso el “abanico de productores” que forman parte de la red, entre los que figuran cultivadores de arroz de Filipinas, productores agrícolas africanos y norteamericanos.
“Un productor ucraniano estuvo publicando un ataque a una planta de silos” en su país, mencionó.
Nario, quien reconoció su poca actividad en las redes sociales, dijo que la organización plantea la necesidad de “amplificar la voz” de los productores agrícolas del mundo.
Y para eso emplear las diferentes plataformas tecnológicas y de comunicación, para difundir las buenas prácticas productivas y relatar experiencias.
En el caso de la producción agrícola uruguaya hubo una transformación significativa en las dos décadas pasadas, que incluyó el crecimiento de la extensión destinada a la producción, el volumen cosechado por hectárea, la diversidad de cultivos y el perfil de los productores, entre otros aspectos.
Alcanza con ver el cambio registrado en el paisaje rural del campo local para tener una dimensión de la apuesta productiva.
En ese marco, la participación de agricultores uruguayos en la mencionada red mundial les permite tener un protagonismo mayor, a la hora de canalizar sus inquietudes, preocupaciones e intereses.
Por ese motivo, tanto Carballal como Nario valoraron la experiencia vivida en ese encuentro anual, donde también las nuevas tendencias tecnológicas fueron centro de atención para los participantes.
Nota de Revista Verde N°102