Ante ola de calor, La Manna (INIA) recomienda tener “mucho cuidado” y “prever” medidas en corrales y tambos
El estrés térmico del rodeo vacuno por las altas temperaturas a esta altura del año debe ser un asunto de preocupación y atención entre los productores, principalmente en los tambos y en los corrales de engorde intensivo de ganado.
Hay que “tener mucho cuidado” y “prever”, “si hay sombra en el predio utilizarla” y emplear “sistemas de aspersión para mojar al animal ya que ayuda a bajar la temperatura”, que tenga “bastante agua” y ´que esté “lo más cercana a los 20 grados”.
Esas y otras recomendaciones hizo el investigador principal en nutrición lechera y ganadería intensiva del INIA, Alejandro La Manna, en el programa Punto de Equilibrio en Carve y revistaverde.com.uy.
Resaltó la importancia en ciertas condiciones “bajar la dieta que no sea tan alta en concentrados y ponerle más fibras”, porque “lleva al animal a consumir menos por día pero no decae”.
En los corrales, “solo por tener sombra el ganado tuvo una ganancia de un 12% más de peso y la eficiencia de conversión mejoró 6%”, comentó ese técnico en base a estudios de tres años.
Indicó que “si bien no tenemos condiciones de estrés severos, si hay problemas y mortandades, entonces es necesaria alguna forma de mitigación”.
“Las categorías más sensibles en los corrales son los más gordos”, porque “la grasa no le permite eliminar el calor”, “los enfermos y los animales recién llegados”, por el estrés, advirtió.
En el ganado lechero, La Manna dijo que “por solo acceder a sombra mejoran algo más de 5 litros” de leche de producción, que las vacas precisan sombra de unos “4 a 5 metros cuadrados por animal”, lo que requiere de “una inversión de US$ 60 por vaca”.
“Una categoría que sufre mucho en verano es la vaca seca porque está recomponiendo tejidos y ubre”, y “pierde casi un litro diario durante el período de lactancia”, acotó.
Sobre los establecimientos con sistemas de cama caliente, el técnico señaló que generalmente se mantienen como lugares frescos. Con la construcción de la sombra se terminan pasando como sistemas de cama caliente, “sin entrar en un encierro pero dándole mejores condiciones a las vacas”, dijo.
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