Compraventa de campos aumentó en casi 100.000 hectáreas en el primer semestre
Este año, el mercado de campos se mantiene “estable”, con “interés” y sin una “gran oferta”. Los predios que aparecen “se van comercializando”, mientras que los valores se “sostienen” tras el incremento registrado en 2022, dijo el responsable de La Consignataria, Santiago Cortina, en el programa Punto de Equilibrio en Carve y en verdenews.com.uy.
Cortina afirmó que en esta actividad “no hay mucho ruido” ni “agresividad” por parte de los potenciales compradores de tierras para la producción agropecuaria.
Un campo ganadero criador en el basalto superficial del norte puede valer entre US$ 2.800 y US$ 3.200 por hectárea. Otro con mayor parte de suelo superficial, ovejero, puede valer algo menos, alrededor de US$ 2.500 o menos. En el sureste, un campo de suelo cristalino con alguna aptitud agrícola puede valer entre US$ 3.500 y US$ 4.000, y dependiendo del perfil del suelo, puede alcanzar un precio de hasta US$ 5.000 por hectárea, sostuvo.
Cortina destacó que se vendieron campos en Durazno de áreas “importantes” con perfil variado, agrícola, ganadero y forestal, por valores superiores a US$ 5.000 la hectárea.
En el primer semestre de 2023, el área total de campos ofrecidos al Instituto Nacional de Colonización fue de unas 88.000 hectáreas, mientras que en el mismo período de este año fue de 180.000 hectáreas, lo que representa un incremento “muy importante”, dijo el operador, con base en los registros de ese ente estatal.
Este año hubo algunas compraventas de campos que resaltaron por el monto y la extensión, como el caso de la compañía japonesa Oji Holdings Corporation, que adquirió 41.000 hectáreas por casi US$ 288 millones, entre otras, según publicó el suplemento Agro de Búsqueda en mayo.
Cortina habló además del mercado de arrendamientos de campos ganaderos y agrícolas, que ahora empezó a tener algo más de oferta, a diferencia de otros años.
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