El lupino avanza y busca su lugar como el cuarto cultivo de invierno
El avance del cultivo de lupino que busca transformarse en el cuarto cultivo de invierno; MegaAgro estará lanzando dos nuevas variedades de colza, una de origen argentino y otra australiana.
El Ingeniero Agrónomo Jorge Foderé, de la División de Insumos de MegaAgro, dijo a VERDE que este año el lupino “está con un crecimiento importante del área, a pesar de ser una especie relativamente nueva en el mercado. Hay que recordar que para la variedad AGT Coyote tuvo en 2022 el primer año comercial y este año estamos en en torno de las 3.000 hectáreas de siembra”.
Agregó que “hoy el lupino se planta en todo el país, se está corriendo la frontera tradicionalmente agrícola gracias al lupino. Debido a las características que tiene la especie se está usando en el litoral como opción en la rotación agrícola, como una alternativa más a los cultivos de invierno con los servicios asociados que aporta la especie. Por eso lo estamos viendo como el cuarto cultivo de invierno. Los productores lo incluyen como un cultivo de renta que aporta servicios al sistema”.
“Esto quiere decir que es un cultivo que brinda rentabilidad, porque estás produciendo granos de muy alto valor, pero a su vez te aporta servicios diferentes básicamente en lo que respecta a dinámica de nutrientes; a la fijación biológica de nitrógeno, liberador de fósforo soluble, así como a incorporar una raíz diferente, al ser pivotante. Hoy la problemática de las chacras agrícolas se basa en las diferentes malezas que están cada vez más difíciles de controlar. Entonces tener la opción de un cultivo diferente, en el que puedas usar otro grupo de herbicidas en preemergencia, es un aporte muy importante para el sistema”, acotó.
El agrónomo dijo que “en las zonas centro, norte y este del país, Agt Coyote está entrando muchísimo como la alternativa ideal en cultivos de invierno. Creo que en ese caso no sustituye, sino que suma un cultivo con muy buena renta en invierno”. “No olvidemos que al lupino la mayoría de los productores lo producen para su propio consumo en la actividad ganadera debido a las características nutricionales excepcionales que tiene el grano. Más allá de la composición química, siempre destacamos al lupino por la gran facilidad que tiene su suministro, lo seguro que es como alimento al no producir enfermedades metabólicas ni trastornos digestivos de importancia. Por dicha razón es una especie tan difundida en Australia. Por ejemplo, los productores que lo están produciendo están encantados por la facilidad en el suministro y lo práctico que es su almacenaje, todos aspectos que van de la mano de la seguridad alimentaria”.
Foderé sostuvo que “a partir del año que viene se va a empezar a generar un mercado comercial de granos porque está pasando que a muchos productores no les interesa dar el grano como suplemento, pero sí le interesa plantar el cultivo. Entonces están ofreciendo áreas para el lupino para luego comercializar el grano. Por otro lado, hay muchos consumidores de grano, como los productores ovejeros, ganaderos de cría, tamberos, etc., que les interesa el grano como suplemento. Por lo que creo que, a medida que va creciendo el área de cultivo de lupino, va en aumento la comercialización del grano también”.
Monitoreo de siembra
Foderé destacó que MegaAgro realizó “un acuerdo con una empresa para generar imágenes satelitales de todas las chacras que están sembradas con lupino. En función de eso vamos generando información que se vuelca a los productores y tenemos una radiografía de lo que está pasando con los cultivos de forma periódica. Esta es una herramienta fantástica que ayuda muchísimo a tener un monitoreo global de todas las chacras de lupino a tiempo real, y sirve mucho para la red de técnicos de la empresa a lo largo del país, que van a las recorridas de chacra con la información previa de las imágenes satelitales, sabiendo de antemano con que se van a encontrar, ir directo a zonas marcadas como problemáticas por si hay algún problema, entre otras ventajas. Dicha información se vuelca a los productores de forma quincenal, la cual la aprecian mucho”.
Indicó que “la idea es brindar un soporte técnico adicional con recomendaciones técnicas en función a la etapa del cultivo. Vamos diagnosticando cómo está la chacra, evaluando y puntuando a su lupino con relación a sus pares sembrados en períodos similares, evaluando cómo están sus cultivos con respecto al mejor registro histórico, y, a medida que se acerca la cosecha, estimando potencial de producción para su propia planificación.
Todo esto suma y no sustituye a las recorridas técnicas del equipo de MegaAgro en cada zona.
Asimismo, con estos registros de cada chacra, la empresa va a contar con un universo de información, la cual vemos muy valiosa para el desarrollo de la especie en nuestro país.
Se adelantan fechas de siembra
El técnico dijo que este año “nos animamos a adelantar las fechas de siembra”, en torno de los 15 días. Las imágenes “están demostrando rendimientos muy buenos”, pero hay que esperar un poco para ver los resultados finales. La tendencia es adelantar “un poco la fecha de siembra. “No obstante, es de destacar que el lupino se adapta con facilidad a distintas fechas de siembra. El máximo potencial quizás sea del 20 de abril al 15 de mayo, ahí es donde se realiza el grueso del área, pero no se descarta siembras tardías (Julio). Quizás no tengas un potencial tan alto como en la siembra temprana, pero el descenso de rendimiento tampoco es tan pronunciado, por lo que puede ser una alternativa también frente a retrasos por motivos climáticos”.
Foderé señaló que se está haciendo seguimiento también de la densidad de siembra, temas de índole sanitario y el uso de promotores de crecimiento. Acerca de la fertilización “se va a generando mucha información”. A pesar de ser una especie que requiera poca fertilización, “ya hay productores que están fertilizando con potasio y micronutrientes para maximizar el potencial. Al tener una base de datos mapeada vamos a generar mucha información que será la base para el futuro”.
Novedades de la colza
Sobre la colza, dijo que “se vienen novedades. El año que viene estamos con dos lanzamientos de dos variedades de orígenes diferentes. Por un lado, una variedad denominada Floriana Inta de origen argentino, con un ciclo primaveral largo. Fue buscado este ciclo a propósito, con la idea de adelantar la siembra a partir del 15 de abril. Con esa fecha de siembra se busca bajar los riesgos de las heladas en la implantación y también bajar los riesgos en floración porque el ciclo se alarga un poco en siembras tempranas. Creemos que es una variedad con un ciclo que faltaba en el mercado, que calza realmente a la perfección para lo que es nuestro clima y datos de evaluación oficial de Inase. Nuestra propia red de ensayos, lo muestra con rendimientos muy por encima del promedio”.
A la vez, informó que se vienen una variedad australiana, que está en etapa de multiplicación de semillas, el cultivar se llamará Renegade TT (tolerante a la triazina). “Es una tecnología novedosa para el país, pero ampliamente difundida en Australia. Con este tipo de cultivares TT, se puede usar por ejemplo simazina en presiembra, y tener un control adicional a las nabolzas y toda la familia de rábanos y malezas resistentes a los herbicidas tradicionales. Hay que mencionar que cada vez es más frecuente el problema de nabo, rábano, mostacilla, una cantidad de malezas de hoja ancha que están muy difícil de controlar, en algunas zonas ya incontrolables. Cada vez tenemos menos herramientas para su control y hace inviable el cultivo. Con el uso responsable de simazinas podremos lograr controlar esas malezas y hacer un cultivo de colza limpio”, concluyó.
Nota de Revista Verde N°109